LA TIERRA DE LA PIEDRA NEGRA


¿Querrían convertirse en desiertos en el desierto,
en luz naranja de risa y llanto,
volverse viento y dicha en la arena, néctar, escalofrío, libertad...

viernes, 8 de octubre de 2010

EL ADORADOR DE CUALQUIER DÍA


                                                      Te mataré mañana cuando la luna salga
                                                      y el primer somormujo me diga su palabra
                                                                            Leopoldo María Panero






Cualquier día me levantaré y será cualquier día,
un día de romper la baraja y dar un volantazo,
de tirar la toalla, comprarse un mulo y no pagar la hipoteca.
Ese día no venderé ni compraré nada,
no me regalarán lágrimas negras,
las uvas de la parra no estarán altas,
y me sentaré a mirar remolinos de hojas y bolsas de plástico,
como un emperador de la nada, dueño de vientos y de brillos.

Cualquier día me levantaré y cualquier día será como cualquier día,
al despertar no estarás allí dormida con semen seco en tu lomo,
me afeitaré adormilado, ducharé este pellejo
y mientras me aprieto el cuello y el alma con una corbata,
haré un esfuerzo para seguir siendo
el adorador de cualquier día,
cualquier día...



                                     

1 comentario:

Fathi dijo...

Todos los días deberíamos gritar esos versos, algunos los piensan, otros los desean,mientras los demás los ignoran.